Felipe (parte III - las vacaciones de Luis y Darío)

Luis y Darío vienen planificando hace mas de un año hacer un viaje a Europa. Darío ya estuvo allá y tiene a su mejor amiga en Londres, por lo que quiere ir a visitarla. Aprovechando que tenían millas por vencerse, decidieron canjearlas y ya tienen pasaje para el próximo setiembre, por un mes.

Su itinerario básicamente es: Roma, Florencia, París, Bruselas, Londres, Barcelona y Madrid. Dado que Felipe los estaba invitando tanto a Madrid, determinaron que allí se quedarían 10 días para estar junto a su amigo.

Felipe empezó a organizarles itinerarios alternativos. Primero, encontrarse con ellos en Florencia y de allí ir a la casa del tano cerca de Venezia, así conocían esa ciudad. De acuerdo a Felipe, él ya había hablado con el tano y no había problema. Los chicos accedieron y empezaron a reprogramar las fechas. A la semana, Felipe les informa que el tano justo en esa fecha no iba a estar disponible, pero que en lugar de encontrarse en Florencia, podían hacerlo en París y tomar un tren a Berlín, para alojarse los tres en la casa de unos amigos de Claudio que viven allí. Nueva reprogramación de fechas.

Luego, no se bien por que razón, lo de Berlín se canceló, y en su lugar Felipe les propone encontrarse en Barcelona, a su vuelta de Londres, estar unos días allí en casa de no se quien y terminar el viaje en Madrid. Luis y Darío ya cansados de idas y vueltas le dijeron que ellos ya habían reservado hotel en Barcelona, que directamente se encontraban en Madrid mejor.

En eso, apareció el tema de la valija. Felipe necesitaba que los chicos le lleven una valija con ropa y cosas que dejó acá en Buenos Aires. Darío le dijo que iba a ser complicado, ya que Madrid era la última escala del viaje. Que si quería Felipe, podían encontrarse en Roma, al inicio del viaje, y darle la valija o caso contrario que le dijera tres o cuatro cosas importantes que separar y se las llevaba, pero que no se veían en posición de andar veinte días cargando una valija ajena por media europa.

Felipe contra atacó. Les dijo que para que iban a ir a lugares tan caros como París, Londres o Roma. Que mejor cambiaran los pasajes y viajaran directo a Madrid, así se quedaban todo el mes en su casa, no gastaban fortunas y el los llevaba a pasear por Barcelona, Toledo, Sevilla y Málaga.

Sus argumentos eran que salvo España, el resto de Europa era caro, feo y que ellos debían hacer algo distinto a lo que hacen todos los argentinos que van a Europa, que en 20 días quieren conocer 10 ciudades y se la pasan corriendo de un lugar a otro.

Como obviamente la respuesta fue negativa, que ya de por sí para Luis y Darío era bastante dedicar un tercio del viaje a Madrid por el solo hecho de visitar a Felipe, ni hablar de pasarse los 30 días en España. Querían ir a Paris, Roma y Londres al menos.

Felipe les dijo que él ya había pedido sus 30 días de vacaciones para esas fechas para poder recibirlos y que lo estaban cagando. La respuesta que recibió fue que ellos desde un principio le habían informado el itinerario y las fechas, que nunca le habían pedido que se tomara vacaciones y menos por los 30 días a sabiendas que ellos no iban a estar juntos todo ese tiempo. Fue inútil.

Pasada una semana Felipe les escribió que hacia un par de meses Laura y Joaquín, dos amigos de Claudio habían viajado a Europa y ellos sí se habían quedado los 20 días del viaje en su piso. Que Claudio no entendía por que este desplante? y que si venían solo por 10 días, que ellos opinaban que para eso, mejor se fuesen a un hotel. Todo esto por mail obviamente.

Los mensajes fueron subiendo de tono y la discusión se hacía vibrante. Felipe se ponía más y más agresivo, y no entendía las razones de Luis y Darío, hasta que finalmente les dijo, "Me cansé de ustedes", los borró del facebook y del MSN.

Cuando me lo contaron les dije "Por una parte mejor, veanlo como si se hubiesen sacado cada uno un tumor de 110 kilos" La gran pregunta que me hicieron es que hacían ahora teniendo los itinerarios y reservas de alojamiento confirmadas, 10 días en Madrid?