viernes, 4 de septiembre de 2009

Suicida-Homicida

Leía el otro día el diario y encontré una noticia que me causó bastante gracia. Resulta que en la madre patria, mas específicamente en Barcelona, una mujer agobiada por sus problemas personales, determinada a terminar con ellos, en lugar de buscarles solución, abrió la ventana de su departamento del 9no piso y se lanzó al vacío.

El derrotero de Marina (creo que ese es el nombre de la protagonista) hubiera sido similar al de cualquier suicida que se precie de tal, es decir: salto palomita, caída libre, cagazo impresionante, pensamiento fugaz ("que pelotuda, que hice!") y estrolada contra el piso, salvo por el hecho que la agobiada candidata a difunta no se cuidó de esperar al momento de saltar, que dos despreocupados transeúntes que venían charlando amigablemente en catalán, terminasen de pasar por la vereda de su casa.

Como no podía ser de otra forma, el peso muerto de la mujer terminó impactando sobre la humanidad aún vivita y coleante de uno de los transeúntes, enviándolo ipso facto y sin escalas a tocar el arpa al mas allá. Ergo, lo cagó matando del golpe.

Amen de matar a Manolo (bauticemos al difunto de alguna forma), rebotó en él y pegó contra el cuerpo de Wenceslao (el amigo de Manolo) quebrándole un brazo y dos costillas. Finalmente, la suicida terminó donde ella quería, estrolada contra el piso, aunque vivita.

Llegaron las ambulancias, se cargaron a Marina y a Wenceslao en sendas camillas. A Manolo lo metieron en una bolsa plástica negra y también se lo cargaron. Wenceslao aun se recupera del acontecimiento. Marina terminó muriendo en la cama de algún hospital catalán.

Dado que a la suicida no la imagino tomando carrera desde la cocina del departamento para lanzarse al vacío, esquivando sillas, la mesa ratona y el sofá de tres cuerpos, su impacto sobre el pobre Manolo no puede ser tomado de otra forma que como un homicidio simple. Acá no hubo un acto sin intención. No se puede pensar en que Manolo falleciera por un accidente en la vía pública. La suicida era a la vez homicida. Joder!

Me quedan varias preguntas: quien deberá pagarle a Wencesalo por los daños y perjuicios? Quien se encarga de indemnizar a la viuda e hijos de Manolo? La gente en Barcelona, a partir de esto debe salir protegida de alguna forma a caminar por las veredas de Sants-Monjuic? Como evitas que una enajenda te caiga del cielo?

1 comentario:

naty dijo...

bueno en barcelona tampoco uno se puede andar suicidando por ahi... no dejan que la gente se muera trankila Joder....