lunes, 24 de noviembre de 2008

Pollo a la cacerola

Y ya que hable del profesor Ríos, vamos con otra de sus creaciones.

En los fondos del colegio, en lo que en ese tiempo era un terral y hoy son lujosas casas de clase alta, se habían delimitado dos zonas, una estaba apenas arada y dividida en parcelitas, la otra al fondo era una casilla de madera, eran el huerto y la granja. Ya desde el primer día de clase nos motivaba a llevar animales para poblar la granja y semillas para sembrar en el huerto. Tengamos en cuenta que por cada colaboración se sumaban puntos, así que desde ese día prestamente acudimos con pollitos, patitos, conejos, cuises y semillas de lechuga, nabo, rabanitos, zanahoria, tomate, repollo y demás vegetales y legumbres.

A medida que avanzaban las semanas, no solo habíamos arado y regado la tierra para sembrar las semillas, sino que también llevamos rutinariamente comida para los animalitos de la granja y limpiabamos su habitat, todo a expensas del bolsillo de nuestros padres. De esa forma vimos crecer las hortalizas y engordar a los animales.

Repentinamente, un día de agosto, el profesor Ríos nos notifico que nuestra futura cosecha había sido atacada por ladrones quienes habían hecho su propia cosecha. Es decir, "hicieron su agosto".

A partir de ahí, a medida que avanzaban las semanas venia con la mala noticia de la muerte de un pollo, de un conejo o una gallina. Lo mas llamativo era que los animales que morían debido a algún extraño mal, eran aquellos animales mas rozagantes y gorditos. Osea, aquellos que estaban listos para la olla.

Inútilmente los animales muertos eran repuestos por nuevos, todos indefectiblemente eran alcanzados por el extraño mal. Jamas vimos un cadáver, las únicas pruebas residían en la palabra del profesor Ríos, el cual con su panza bonachona y su sonrisa cubierta por un fino bigote, parecía un remedo del sargento Garcia. Finalmente, como era de esperase, la peste terminó barriendo con el ultimo habitante de la granja y con nuestras ilusiones.

Algunos años después, una tarde en que nos habíamos quedado fuera de hora organizando no se que actividad vimos al profesor Ríos acercando su auto hasta la casucha de la granja e ingresando a la volada dos lindos pollos de 3 kilos cada uno al baúl del coche.

La peste tenia nombre, se llamaba peugeot 404 y atacaba por las tardes. Que hicimos? nada, reírnos de nuestra ingenuidad juvenil.

Pregunta: Donde consigo la receta para hacer un rico pato a la naranja?

2 comentarios:

Unknown dijo...

Me acorde de mis vacaciones en Córdoba con mis abuelos, en la casa de unos tíos, en donde en el fondo tenían una granja, con pollos, cerdos, y demás animales domésticos para mis ojos de 6 años...un día una tía abuela me dice Sergito vamos a ver a los pollitos, y me mete en el jaulón de estos animalitos, después de observarlos por varios minutos me dice cual me gustaba más. Yo con mucha ternura selecciono uno de ellos: "ese tía, el blanco creo que es el más bueno" mi buena tía toma de las patas al pollo elegido, con la otra mano del cogote, y cual matraca delante de mis grandes ojos le hace girar. Ese día ni almorcé ni cené. Y hasta ahora no me gusta mucho el pollo.
Sergio Aprea

Pin dijo...

Receta de Pato a la naranja

Ingredientes y preparación de esta receta de cocina.

Ingredientes

Pato: 1,8 kg
Jugo de naranja: 1 unidad
Naranja: 4
Cointreau: 2/3 vaso largo
Vinagre: 1 cucharada
Manteca: 1 trocito
Caldo de carne: 2/3 vaso
Maicena: 2 cucharaditas
Sal
Pimienta

Preparación

Limpiar bien el pato por dentro y por fuera con agua templada y secar. En una cazuela refractaria honda y bien amplia, en la que quepa el pato, derretir la manteca y, a fuego fuerte, dorar por ambos lados.Añadir el Cointreau, menos un dedito, y cocinar un par de minutos más. Agregar el vinagre, el jugo de naranja y el Caldo de carne y llevar a ebullición. Bajar el fuego y dejar cocer 20 minutos más.Sacar el pato de la cazuela y colocar en una fuente para servir, manteniendolo caliente en el horno bajo o precalentando la fuente. Llevar la salsa a ebullición sin dejar de remover bien, pasando la cuchara de madera por el Fondo y las paredes. Bajar el fuego y dejar cocinarse unos minutos más. Apartar del fuego.Quitar las bolsas de grasa de la superficie y pasar por el chino para obtener una salsa más refinada. Salpimentar y añadir el resto del Coitreau.En una taza de salsa del cazo, diluir la maicena poco a poco. Verter en el resto de la salsa y volver a llevar a ebullición, batiendo continuamente. Bajar el fuego y cocinar unos minutos hasta que espese.Pelar las naranjas, separar los gajos y pelarlos. Añadir la mitad de gajos a la salsa hasta que se calienten bien. Apartar del fuego.Verter un poco de salsa (sin gajos) sobre el pato y colocar los gajos crudos alrededor para decorar. Servir la salsa con los gajos cocinados aparte, en salsera.

si lo llegas a preparar y te queda bueno yo quiero probarlo =P